Bucaramanga.- Diecisiete adolescentes, ex integrantes de Parches que
delinquen en los barrios marginales de la ciudad, cambiaron sus cuchillos y
revólveres por herramientas de trabajo, y la marihuana, bazuco y ‘perico’ por
harina de trigo y polvo de hornear. Desde ayer, estos muchachos son
propietarios de su propia panadería: Pan a lo Bien, situada en la calle 61
N°8-77 local 9 del sector Metrópolis III, Ciudadela Real de Minas.
Este proceso fue posible gracias a la iniciativa de la
Secretaría de Gobierno Municipal, que contó con el apoyo del SENA, la Policía y
Cajasan, entidad que se encargó de capacitarlos.
“Es propósito del Gobierno Local ayudar a la rehabilitación
de los muchachos que por una u otra razón han caído en el problema de las
drogas y la delincuencia. En esta oportunidad el proceso lo arrancaron 87
jóvenes, pero sólo lo concluyeron 17, quienes ya son propietarios de su propia
panadería, la cual cuenta con el registro de la Cámara de Comercio. A través
del Imebú los seguiremos acompañando en las estrategias de mercadeo. Estoy
seguro que la comunidad les va a cooperar comprándoles el pan y ellos van a
salir adelante”, manifestó el Secretario de Gobierno, Fernando Humberto Serrano
Munar.
El funcionario invitó a todos los integrantes de Los Parches
a acogerse a las políticas de rehabilitación que les ofrece la Administración
Municipal, las cuales pretenden la construcción de una sociedad más justa,
segura y con oportunidades de trabajo.
