Ingenieros militares instalan dos puentes peatonales en Santander
Bucaramanga, 27 de Marzo 2013.
Soldados de la Segunda División en coordinación con la Presidencia de la
República y la gobernación de Santander
entregarán puentes metálicos que permitirán el beneficio de 600 familias
del municipio de Girón.
Las comunidades de las veredas
Río de Oro y Palogordo, afectadas por la pasada ola invernal que dejó en
pésimas condiciones la vía de acceso a sus viviendas, tendrán una pronta
solución gracias al apoyo del programa puentes peatonales de la presidencia y
el trabajo continuo de treinta soldados del Batallón de Ingenieros N° 5
´Coronel Francisco José de Caldas´ adscrito a la Quinta Brigada.
Los puentes que se encuentran
en mal estado, serán reemplazados por estructuras sólidas construidas en acero,
con capacidad para 300 kilogramos por metro lineal, que facilitarán no solo el
tránsito de peatones, sino también
animales con carga y motocicletas.
El señor Teniente Coronel José
Manuel Gómez, comandante del Batallón Caldas, señaló “los soldados de la
Segunda División en coordinación con la presidencia de la República, y la
gobernación de Santander que ha puesto los recursos, estamos trabajando para la
entrega de estas dos estructuras, iniciamos
con perforaciones y fracturación de rocas para lograr la instalación de
los puentes. En Palogordo el puente peatonal será de 50 metros de longitud y el
de Río de Oro de 80 metros”.
Para el ingeniero Carlos
Andrés Barrera, coordinador del programa puentes peatonales de emergencia del
sistema nacional de la presidencia, “el apoyo del Ejército Nacional es
fundamental para que la estructuras sean armadas rápidamente, el ensamble tarda
entre dos o tres semanas, con estos dos
puentes estaríamos entregando cinco puentes peatonales de emergencia en Santander,
beneficiando a poblaciones que se encontraban aisladas”.
De otra parte, Rósmira
Ramírez, quien vive hace 20 años en la vereda Palogordo, el puente es la única
vía de comunicación para que sus tres hijas puedan acudir al colegio, “mis
hijas diariamente deben pasar el zarando, no tenemos más vías de comunicación,
es un peligro no solo para ellas sino para todos los niños que van al colegio,
pues cuando llueve se crece el río y se lleva todas las tablas, y así tenemos
que pasar. Aquí se cultiva limón, piña y tabaco, productos que también debemos
pasamos por el zarando”. Fuente: Prensa de la Quinta Brigada